Rebeca Monzo
Mientras leía el documento Restructuración de la fuerza laboral, y repasaba una vez más el listado de los oficios por cuenta propia que se van a autorizar, no podía dejar de pensar en dos cosas fundamentales. Primero cómo es posible efectuar el despido de más de quinientas mil personas en edad laboral, y decirles tan simplonamente, que se pueden incorporar al sector privado. ¿A qué sector privado se refieren? El documento no lo aclara. ¿No sería mucho más razonable crear primero un
verdadero y sólido sector privado, legislado debidamente, sin caer en esas trampas casi insalvables, que son los
desmesurados impuestos? Por otra parte, cuando leía uno a uno, los oficios plasmados en el papel, sentía indignación y vergüenza ajena. Ningún gobierno que se respete sería capaz de elaborar semejante listado propio del Medioevo.
Esto, como ya expresé anteriormente, va a traer consigo innumerables problemas sociales. Los más, serán posiblemente el incremento de la delincuencia: asaltos, robos, chantaje, por nombrar solamente algunos, relacionados directamente a lo económico, ni qué decir del posible incremento de la taza de suicidios, que aunque las cifras se manejan muy confidencialmente, están entre las más altas de América latina. Esto, como leí recientemente en un artículo muy bueno que llegó a mi correo, es
poner la carreta delante de los bueyes.
En mi modesta opinión, me parece que se trata una vez más de entretener a la población y edulcorarle un tanto la terrible situación que se avecina. Ya se ha hecho algo similar, en anteriores etapas de manifiesto descontento popular. El resultado de todo este reordenamiento sin crear previamente las condiciones, puede ser algo así como,
echarle más leña al fuego
Tomado del Blog Por el ojo de la aguja
Echarle mas leña al fuego
Excelente articulo. Gracias por colgarlo en tu blog.
ResponderBorrarCariños